Coste
3,910,39 €
0,317 €/ha forestal
0,216 €/ha Zona Piloto
83,20 €/parcela
Los costes comprenden:
| Análisis de datos de superficie |
| Localización parcelas IFN |
| Desplazamiento a los puntos del inventario |
| Situación de los dispositivos |
| Medición sotobosque |
| Procesado de datos |
| Análisis estadístico |
| Amortización vehículo |
| Programas informáticos: SPSS |
| Ordenadores |
Resultados
Tabla 1.4.5. Biomasa y contenido de carbono en el sotobosque en la superficie de Bosque de la Zona Piloto
Figura 1.4.5. Carbono en sotobosque en la superficie de Bosque según la especie
Observaciones
El carbono en el sotobosque se ha estimado en el estrato arbustivo y en parte del herbáceo (helechos) según datos bibliográficos y en función de su altura y de la cobertura en las 47 parcelas muestreadas durante el trabajo de campo del Proyecto.
Como se aprecia, Buxus sempervirens representa más de la mitad del total del carbono retenido por el sotobosque, a pesar de estar presente sólo en 5 de las 47 parcelas muestreadas, el porcentaje de ocupación en ellas es elevado (entre 15 y 80%) al igual que su altura (entre 1 y 4,5m). En “otras arbustivas” se han agrupado: Crataegus monogyna, Daboecia cantabrica, Genista hispanica, Hedera helix, Juniperus oxycedrus, Rosa sp., Sambucus nigra y Ulex europaeus.
Por lo que respecta a los helechos, el 95,5% del carbono lo retiene Pteridium aquilinum, la especie más frecuente encontrada en la zona.
En la evaluación no sean incluido los estratos estrato 27 (Otras Tierras Boscosas) 13 (masa de haya y roble en estado repoblado) y 28 (vegetación de ribera). Los estratos incluidos suman un 98% de la superficie de Bosque.
Problemática y mejora
Debido a la falta de trabajos realizados en zonas similares a la región de Navarra, se han tomado datos bibliográficos de dos trabajos realizados en Portugal (Silva et al., 2004 ).El Carbono se ha evaluado en su totalidad en el matorral, y en el compartimento herbáceo únicamente para las especies de helecho, debido a la falta de datos para poder evaluar el resto.
Por lo tanto, el carbono retenido en los pies no inventariables (árboles de diámetro no inventariable considerados en el trabajo de campo en un estrato diferenciado del arbustivo) no ha podido ser evaluado. Por ejemplo, Crataegus monogyna está presente en otras seis parcelas, en ellas ha sido considerado dentro del grupo “pies no inventariables” y no ha sido tenido en cuenta en esta valoración del carbono.
Es preciso destacar que en algunos casos las especies herbáceas son difíciles de identificar y es necesario disponer de personal cualificado para ello. En la evaluación del sotobosque en campo, sólo se toman las tres especies más abundantes. Este hecho no tiene una gran influencia en la evaluación de este Indicador, pero sí lo tiene en aspectos relacionados con la biodiversidad ya que algunas especies son indicadoras de las características del medio, como Buxus sempervirens o representan problemas como Ilex aquifolium que está dificultando la regeneración de Fagus sylvatica en la zona.
Comentarios y conclusión
El análisis estadístico revela que no existen diferencias significativas en el Carbono retenido por el sotobosque en los estratos 02 y 25. Sin embargo, es preciso destacar que el tamaño muestral de los estratos es bajo, salvo en el caso del estrato 01 (34 parcelas), lo que influencia claramente los resultados.
La evaluación del Indicador implica la recolección de datos en campo, lo que encarece la estimación y los costes de la misma, si bien es preciso indicar que la toma de datos resulta rápida y sencilla. El tiempo medio de evaluación del sotobosque en las 47 parcelas seleccionadas para el Proyecto fue de 10 minutos.
En cualquier caso, es preciso remarcar que, debido a las problemáticas expuestas, no ha podido completarse una valoración rigurosa del Indicador y los resultados mostrados suponen una primera aproximación.
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INTERREG IIIB Espace Atlantique